jueves, 14 de marzo de 2019

Aspecto Ético de la Tutoria



La ética:  Es esencialmente un saber para actuar de un modo racional, también nos enseña a tomar decisiones prudentes, o sea correctas o moralmente justas.
El ser humano aprende más por lo que ve que por lo que dicen; en la formación del alumno debe existir coherencia entre el decir, el sentir y el hacer; el mensaje debe ser uno y repetido en forma sistemática y coherente por los directivos, docentes y personal administrativo con quienes el estudiante, se relaciona en sus experiencias de aprendizaje.
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La ética de la tutoria.
El bien en la orientación educativa y en la tutoría sería el bienestar en el ámbito de la educación y el aprendizaje, la calidad educativa y el esclarecimiento de las dificultades en el aprendizaje y su afrontamiento reparatorio. El docente es un importante instrumento en su trabajo, cumple un proceso interno orientador-tutorial. Lo central es el compromiso personal.
Hay una ética del encuentro entre personas: la empatía o sea ponerse en el lugar de cada uno de los otros por la comprensión, originada en el amor. Requiere autor reflexión, intercambio con otros docentes, estar atentos a la calidad de los vínculos.
La función básica del profesor orientador o tutor es ayudar al otro acompañándolo para el afrontamiento y la resolución de problemas en la situación de aprendizaje, evitando la forma compulsiva, la manipulación o dominación sobre los otros. Hay que aprender qué, como y cuando decir lo que el alumno desea saber.
La ética persigue la excelencia humana.Un comportamiento ético es beneficioso para la persona que actúa porque la enriquece interiormente, porque crece en humanidad. Lo que persigue la ética es mejorar la calidad humana, que cada individuo llegue a ser mejor persona.
Aspectos Éticos De la Tutoria.
En todo momento se requiere una reflexión para evaluar los aspectos éticos de nuestro quehacer o de las diversas situaciones que abordamos como orientadores, tutores y docentes.
1.     Voluntad de aprender: es la fuerza que mueve al hombre a adquirir conocimientos por medio del estudio o la experiencia. La voluntad de aprender nos permite la obtención y el manejo de nuevas herramientas y el desarrollo de aptitudes para ponerlas al servicio de los tutorados.
2.     Especialización: es el conocimiento extenso y profundo sobre un área. La especialización da lugar al manejo optimo de conocimientos y metodologías, herramientas que permiten satisfacer las necesidades de los estudiantes y cumplir los objetivos de las tutorías. La especialización aumenta las posibilidades de superación personal y colaboración con los demás.
3.     Práctica continua: implica trabajo arduo y abundante; descubrir que se tiene facultad para algo es muy gratificante, pero resulta casi inútil sino se suma la destreza que se logra con el ejercicio constante. Este ejercicio lleva consigo muchos ensayos y autocríticas, y aunque parezca monótono ayuda a diferenciar a los tutores exitosos de los mediocres. La práctica continua es la forma como se puede conseguir la excelencia en cualquier actividad humana.
4.     Convivencia con otros tutores: es el tiempo para fraternizar con otros tutores profesionales, compartiendo experiencias e intercambiando conocimientos. Esto permite normar pautas, lineamientos, orientaciones y re formulación de la acción tutorial.
5.     Ayudar a los demás: significa hacer algo más por el tutorado, no solo cumplir con la tarea sino añadir el “valor agregado” (toque personal). En el rol de tutor, el deseo de ayudar a los demás se llama servicio, y es diferente a la ayuda desinteresada que se le da a un amigo. El servicio responde a una necesidad de los demás que es la de ser reconocido como persona.

Referencias:
Autor: Willy Saavedra Villacrez. (11 de Agosto de 2011). Tutoría educativa: conceptos, roles, cualidades. 09 de Marzo de 2019, de Formación Integral Sitio web: http://formación-integral.com.ar/website/?p=161



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